AFP.


Al menos 47 personas han muerto y 140 han resultado heridas por el paso del tifón 'Úrsula' durante el día de Navidad en Filipinas, según el nuevo balance publicado este domingo por el Consejo Nacional para la Gestión de Desastres, que cifra en nueve los desaparecidos.

El tifón, también conocido como 'Phanfone', ha dañado cerca de 300.000 viviendas, 372 escuelas y 31 hospitales en las provincias del este y del centro del país, donde han sido evacuadas más de 146.000 personas, de acuerdo con el último balance, publicado en la web de la organización. El total de personas afectadas se acerca ya a los dos millones.

Entre los fallecidos se encuentran tres tripulantes de un bote a motor que naufragó en la provincia de Mindoro Oriental, una familia de seis personas arrastradas por una inundación en la provincia de Iloilo, así como un niño de 13 años y un hombre de 38, electrocutados en dos incidentes separados en las provincias de Leyte y Leyte Sur.

'Úrsula', el tifón número 21 del año en Filipinas, ha llegado a registrar vientos de hasta 130 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 160. Aunque no ha sido uno de los más poderosos, su paso ha dejado una estela de destrucción mucho más pronunciada tras arrasar algunas de las zonas e islas más pobres y menos desarrolladas del archipiélago.

Al menos 115 vuelos nacionales también han sido cancelados y la televisión filipina ha mostrado daños menores en el aeropuerto de Kalibo, una de las alternativas turísticas en el centro del archipiélago. Por su parte, el Ministerio de Agricultura ha hecho una primera valoración de daños en el sector cifrada en más de diez millones de euros.

Aunque el tifón ya ha abandonado el país, las autoridades mantiene la alerta ante el frente frío que ha dejado su rastro, y que podría provocar nuevas lluvias torrenciales, con las consiguientes inundaciones, en las próximas horas, según ha informado la oficina nacional de meteorología.